A pesar del ajuste macroeconómico en Argentina, el puente internacional General Artigas experimentó largas filas de vehículos en la tarde y noche del domingo. La diferencia de precios sigue atrayendo a uruguayos en busca de productos más económicos.
EL TELEGRAFO constató que al atardecer, las filas de vehículos en la vecina orilla eran comparables a tiempos anteriores, cuando la brecha de precios era significativamente mayor. A pesar de una reducción en esta diferencia, algunos productos en Argentina continúan siendo más convenientes para los uruguayos.
El movimiento de tránsito vecinal refleja que, aunque la brecha se haya reducido, las compras transfronterizas siguen siendo una opción viable y atractiva. Los uruguayos aprovechan la oportunidad para adquirir productos a precios más bajos, manteniendo el flujo constante de vehículos en el puente.
Este fenómeno evidencia el impacto de los ajustes económicos en las dinámicas de consumo regional, donde incluso pequeños márgenes de diferencia pueden motivar un considerable desplazamiento vecinal.
