El frigorífico salteño Daymán Meat, proveedor de carnes al mercado interno y externo, anunció la suspensión indefinida de sus operaciones debido a dificultades para conseguir animales para faena, enviando a sus trabajadores al seguro de paro por cuatro meses.

Daymán Meat, un importante frigorífico ubicado en Salto, ha decidido interrumpir sus actividades de faena e industrialización «por tiempo indefinido». La empresa, que emplea a unas 150 personas y se dedica principalmente al procesamiento de ovinos para el mercado interno y exportación, especialmente a Brasil, comunicó esta medida a sus trabajadores, quienes serán enviados al seguro de paro por cuatro meses. La empresa espera reanudar sus actividades cuando «la zafra mejore».

La empresa explicó que la suspensión se debe a la dificultad para conseguir animales para faena, un problema que ha afectado su capacidad operativa. Esta situación ha generado preocupación en Salto y en las zonas rurales del departamento, dado que el frigorífico es una fuente significativa de empleo y un importante cliente para los ovinocultores locales. La decisión ha tenido un fuerte impacto en la comunidad, que depende en gran medida de esta actividad económica.

Daymán Meat, que es la quinta planta con mayor cantidad de ovinos faenados en lo que va de 2024, totalizando 30.146 cabezas, ha estado enfrentando dificultades financieras y operativas desde principios de abril. Según Martín Cardozo, presidente de la Federación Obrera Industria de la Carne y Afines (Foica), la empresa ya había mostrado problemas con atrasos en los pagos y había reducido su personal al 50%, con la otra mitad en seguro de desempleo.

En el comunicado oficial, la empresa expresó su intención de reorganizar las deudas y pagos pendientes durante este período de inactividad. «Si Dios quiere, volveremos con fuerza», afirmaron los directivos de Daymán Meat, quienes también reconocieron la existencia de deudas con proveedores de animales y salarios vacacionales atrasados de 2022 y 2023. La situación sigue siendo incierta, y tanto los trabajadores como los proveedores están a la espera de una solución que permita la reactivación de las operaciones del frigorífico.